Así trabaja una prostituta virtual

A finales de marzo de 2020, el mundo estaba sumido en una especie de parada obligatoria. El coronavirus se había expandido por todo el mundo y la pandemia era ya una realidad incuestionable, salvo por unos cuantos conspiranoicos. Los gobiernos optaron habitualmente por pedir a la gente que se encerrara en sus casos, impidiendo en muchos casos el traslado entre pueblos o ciudades. Esto generó, a su vez, un clima de confusión brutal porque era la primera vez que debíamos estar encerrados en confinamiento, en muchos casos solos, con tal de evitar la enfermedad. Frenar el contagio era lo obligatorio en ese momento, y lo que en principio se esperaba para dos semanas terminó durando dos meses. Un periodo en el que muchas familias quedaron separadas, sin poder siquiera despedir a sus seres queridos que se marchaban solos en los hospitales. También hubo muchas parejas que no pudieron estar juntas, con todo lo que eso supone para su vida sentimental. Como es natural, el confinamiento aumentó muchísimo el consumo de porno y sexo virtual.

Muchos trabajadores también tuvieron que quedarse en casa sin poder acceder a sus puestos y oficinas, algo que no sentó demasiado bien. Algunas empresas tuvieron que minimizar su producción y echaron mano de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo para equilibrar sus plantillas. Pero también había profesionales que no podían vivir de esa manera, como las prostitutas, por ejemplo. Fueron, sin lugar a dudas, uno de los gremios más azotados por la pandemia, no solo por las imposiciones gubernamentales, sino por el propio hecho del temor al contagio cuando todo volvió a la “normalidad”. En muchos casos, estas chicas ni siquiera tenían derecho a ayudas, ya que su trabajo está fuera de la ley. ¿Cómo sobrevivir en un momento así? Gracias a Internet y al cibersexo, que provocó el auge definitivo de las prostitutas virtuales. Estas chicas trabajaban desde casa realizando llamadas sexuales y conseguían, al menos, ganar algo de dinero mientras la situación cambiaba. Sin embargo, el éxito de esta tendencia ha sido tal que muchas de estas chicas se han quedado como prostitutas virtuales, un trabajo normalmente más cómodo y seguro que el de una escort tradicional.

Las estafas cibernéticas más comunes

La expansión de Internet en las últimas tres décadas ha sido un evento tan crucial para la Humanidad como pudo serlo en su momento la llegada de los europeos a América, o la invención de la imprenta. Una revolución a tantos niveles que todavía estamos intentando procesarla, de hecho. Cada día hay novedades en torno al mundo online. Aparecen nuevas tecnologías, como las inteligencias artificiales, que prometen volver a cambiarlo todo en apenas unos años. Y además, todo ha coincidido con el cambio de milenio, en una etapa en la que la sociedad todavía se está adaptando a muchos cambios. Hay quien dice que Internet ha creado un nuevo mundo, aunque en realidad, seguramente sea mejor explicar que solo ha cambiado el que teníamos. Seguimos haciendo lo mismo que hace cien años, solo que a través de una nueva vía. Nos comunicamos más rápido, buscamos la felicidad en el entretenimiento y el amor, e incluso también hacemos el mal a través de Internet.

En los primeros años de la red de redes, la seguridad de la mayoría de servidores y páginas era cuanto menos cuestionable. Los hackers más adelantados prácticamente campaban a sus anchas en un mundo cibernético que todavía no estaba controlado. Cuando Internet creció y se hizo patente la necesidad de crear una serie de normas legales para evitar estafas, los hackers ya llevaban mucha ventaja. Han tenido que pasar años para que la mayoría de usuarios se sientan seguros a la hora de hacer sus compras por Internet. Dar los datos de su tarjeta de crédito, o incluso realizar trámites administrativos desde casa. Evidentemente, la seguridad se ha reforzado mucho en estos años, y se ha hecho también un gran esfuerzo en educar a la población para que evite las estafas cibernéticas. Sin embargo, todavía hay quien las sufre, ya que como decimos los expertos en hackeos suelen tener conocimientos mucho más profundos que los de cualquier usuario común. Basta con poner un anzuelo para que cualquier hombre o mujer pique en la estafa, y acabe lamentándose de por vida. En este artículo vamos a recoger las estafas cibernéticas más habituales, y la forma en la que podemos luchar contra ellas.

Cómo ganar dinero con el sexo online

Si hace tan solo veinte años nos hubieran dicho que podríamos estar jugando de forma remota con un amigo en la otra punta del mundo, sin retrasos ni lags, no lo hubiéramos creído. Internet ha cambiado el mundo en tan solo un par de décadas, y sorprende no solo por la rapidez de esa evolución, sino por la capacidad de llegar tan lejos, de convertirse en algo indispensable hoy por hoy en casi cualquier campo. De hecho, son muy pocos los negocios que a día de hoy ya no tienen que ver nada con Internet. Desde las tiendas online propiamente dichas a restaurantes que utilizan sus redes para captar nuevos clientes. La forma en la que se publicitan estos nuevos negocios, a través de Internet, o incluso las opciones para reservar mesa, ver el menú o pedir online… Es un mundo lleno de posibilidades que también ha llegado para cambiar por completo la industria del sexo, esa que tantos millones mueve.

El sexo sigue siendo un tabú para muchos, pero eso no quita para que sea consumido en todo el mundo, y más ahora, en la era de Internet. La red ha permitido que tengamos a nuestro alcance todo el contenido sexual que deseemos, porque las productoras han tenido que resignarse a eso de no pagar por ver porno. Las plataformas ganan dinero de otras muchas formas, así que cada uno se ha adaptado lo mejor que ha podido a esta nueva e imparable realidad. De hecho, Internet también permitido que personas totalmente anónimas puedan ganarse la vida en la industria del sexo, sin necesidad de estar en ninguna productora. Como con tantos otros negocios, se han abolido los intermediarios para que la chica o el chico de turno ofrezcan su contenido a sus seguidos, a los consumidores finales. De esta forma, la red está permitiendo que muchos puedan vivir del porno a su manera, con sus propias reglas, horarios y demás. Aquí vamos a analizar cómo ganar dinero a través del sexo online, sin salir de casa y de una forma rápida y eficiente.

Videollamadas por Whatsapp con escorts ¿cómo son?

Las tecnologías están cambiando por completo la forma en la que nos relacionamos con los demás. Gracias a Internet, las distancias hoy en día son menos grandes, y podemos estar en contacto con personas al otro lado del mundo. Llamadas, mensajes e incluso videollamadas con una calidad sorprendente nos acercan a ese futuro en el que casi era posible teletransportarse. Todavía no es así, pero las relaciones virtuales son cada vez más comunes. De hecho, hoy en día muchas parejas ya se conocen a través de las nuevas tecnologías. Los tiempos de los foros y las redes sociales han dado paso a aplicaciones como Tinder o Meetic. Gente que está cansada de buscar el amor en los mismos lugares de siempre, y que busca cambiar un poco de aires. Un verdadero buffet de encuentros casuales con chicos y chicas cercanos a nosotros, que no tienen que llevar a nada más si no queremos…

Todo esto ha afectado incluso al oficio más antiguo del mundo. Las nuevas tecnologías son una herramienta realmente útil para las personas que trabajan en el sexo de pago, la mayoría de ellas chicas. No solo pueden subir sus perfiles a páginas de anuncios para adultos, encontrando muy fácilmente a sus clientes sin salir de casa. El contacto con ellos a través de Whatsapp es mucho más rápido y seguro. Y además, las chicas pueden ofrecer incluso servicios telemáticos, es decir, a distancia.

Cómo funciona una impresora 3d

Conforme la tecnología ha ido avanzando a lo largo de los siglos, el ser humano ha sido capaz de adaptarla a sus necesidades, intentando principalmente llevar una vida más cómoda, creando herramientas que nos permitan viajar más rápido, comunicarnos eficazmente en la distancia, disfrutar de una vida más tranquila y segura… Son muchos los inventos que han permitido estos adelantos, a nivel físico e intelectual. No en vano, la invención de la imprenta por parte de Gutemberg a mediados del siglo XV marca un punto de inflexión en la Historia, dando paso a la era moderna, ya que gracias a aquel invento el conocimiento pudo expandirse de una forma mucho más rápida y eficaz y dejo de estar en manos de unos pocos. Desde entonces, han sido numerosos los inventos que han permitido seguir adelante con la evolución de nuestra especie.

En las últimas décadas, sin embargo, estamos viviendo una auténtica revolución gracias a las últimas tecnologías creadas que ponen a disposición de cualquiera, en su propia casa, todo un mundo de posibilidades y opciones. Internet, por ejemplo, ha servido para expandir el conocimiento (y las noticias falsas) por todo el mundo, suponiendo una ventana a todo lo que queríamos saber y conocer. Los inventos tecnológicos de las últimas décadas están permitiendo avances increíbles, y entre ellos hemos de contar también las impresoras 3D, aparatos que hasta hace poco solo estaban en las fábricas, y que ahora pueden estar al alcance de cualquiera, permitiendo, gracias a modelos descargables desde Internet, imprimir casi cualquier cosa en nuestro propio hogar.

Cómo funciona un microondas, curiosidades y funcionalidad sobre este común aparato

Llegas a casa cansado del trabajo, coges un tupper de la nevera, lo metes en una caja de metal o de plástico, pulsas un botón, esperas unos pocos minutos y tu comida ya está caliente y lista para ser comida. Este pequeño gesto que hacemos de forma diaria sin pararnos a pensar lo más mínimo en lo que estamos haciendo, en realidad es bastante más curioso y creo que el que más, o el que menos se ha planteado alguna vez en su vida, ¿cómo es posible que un microondas caliente nuestros alimentos? ¿Cuál es la historia del microondas?

En masticable.org nos hemos propuesto responder a esa pregunta y es que nadie debería de volver a calentar su comida en un microondas sin saber exactamente cuál es el proceso interno que está realizando este aparato mientras nosotros esperamos a que la comida se caliente.